La aventura de Marian, Yolanda, Carmen, Susana y Patricia para cruzar el Atlántico a bordo del Cannonball ha levado anclas. A las doce del mediodía del domingo 6 de noviembre, el velero soltó amarras desde la Marina Real Juan Carlos I de Valencia e inició la travesía rumbo a Martinica.
Tras unos emotivos momentos de despedidas de sus familias y amigos, en los que mostraron más ilusión que nervios por la aventura que estaban a punto de emprender, comenzó la singladura. “Tenemos muchas ganas de salir ya, de empezar la verdadera aventura con la que queremos demostrar que hay esperanza después del cáncer”, aseguraba Carmen Peláez. ”No tememos al Atlántico, lo peor ya lo hemos vivido, ahora nos toca disfrutar esta aventura y recordar por qué lo hacemos, para apoyar la investigación oncológica para que otros pacientes, como nosotras, puedan vencer el cáncer”, insistía Yolanda Preciados. “Estoy muy emocionada de encontrarme a todas mis amigas de “Corre en rosa” que han venido a despedirme, ellas van conmigo en el barco”, contaba Marian Santiago.
“Queremos expresaron nuestro agradecimiento más profundo. Gracias a vosotras nuestra voz es un poquito más alta. Sois unas grandes embajadoras de la investigación y de Vencer el Cáncer. Es un orgullo que llevéis nuestra bandera y nuestra causa en esta aventura. Seguid sembrando la esperanza, estaremos en cada ola, en cada golpe de viento, de corazón con vosotras, feliz travesía”, se despedía Esteban Varadé, director ejecutivo de la Fundación Vencer el Cáncer.
Tras cortar una cinta inaugural acompañadas por el delegado de Gobierno en la Comunitat Valenciana, Juan Carlos Moragues, las cinco tripulantes que después de vencer al cáncer se enfrentan al Océano zarparon en el velero que fue escoltado por una lancha costera del Servicio Marítimo de la Guardia Civil -que hizo sonar su sirena- y una pequeña flota de embarcaciones: varias zodiac y veleros, con familiares, amigos, periodistas, patrocinadores como Ilunion Hoteles… al tiempo que mil globos rosas se elevaban en el aire, un último adiós de la Fundación Astra Zéneca, la Asocación de Afectados por el Cáncer de Ovario y la Asociación Española de Cáncer de Pulmón, como homenaje a todas las personas que luchan día a día contra el cáncer. Al llegar a la altura del Club Náutico de Valencia, el Cannonbal fue rodeado por las embarcaciones que participaban en la regata Varadero del Naútico, una última despedida nates de adentrarse en mar abierto.
Con el #RetoPelayoVida se pretende demostrar que después del cáncer hay mucha vida. Por eso estas cinco mujeres, entre los 38 y 57 años, son las encargadas de tripular este velero de 73 pies y 37 toneladas cuya partida puso fin a la Valencia Boat Show.
La primera etapa de esta travesía las llevará a Málaga, después a Tenerife y desde allí hasta Martinica en una singladura que las cinco estaban impacientes por comenzar.
Las tripulantes estarán supervisadas en todo momento por dos regatistas situados de élite: el jefe de expedición, Diego Fructuoso de la Volvo Ocean Race y Iago López -Marra recién llegado de los Juegos Olímpicos de Río. Además, durante la travesía les acompañará el médico del Grupo Hospitalario Quirónsalud, Alberto Francés.
Buena mar!!!! iremos siguiendo y contando esta maravillosa travesía.