Mónica Monte (a la que vemos en la imagen superior, a la derecha, acompañada de María y Rodrigo en la Jornada de Larga Solidaridad de 2015) es una de las precursoras de Toledo Vence el Cáncer, la iniciativa que pretendía que toda la ciudad de Toledo se volcase en el apoyo a la investigación oncológica, a través de eventos deportivos, turísticos, culturales… en los que promover la vida sana y recaudar fondos para la Fundación Vencer el Cáncer.
Año y medio después de su puesta en marcha, Toledo Vence el Cáncer ha sido un ejemplo en España y continúa con éxito organizando actividades en las que colaboran y participan la sociedad toledana, las instituciones, las empresas… pero, sobre todo, personas solidarias, como la propia Mónica, como María -con la que empezó todo- o como Rodrigo, que ayuda a organizar algunos de los eventos de Toledo Vence el Cáncer.
Y uno de esos eventos destacados es el II Memorial Pedro Monte o II Jornada de Larga Solidaridad, que se celebra el 20 de mayo 2016, en las pistas de atletismo de Santa María de Benquerencia, con el que Mónica ha querido rendir homenaje a su padre, coincidiendo con el aniversario de su fallecimiento, el que le inspiró para crear esta iniciativa solidaria.
Aprovechamos para hablar con Mónica y conocer un poco más sus motivaciones, empezando por saber qué la llevó a poner en marcha este Memorial Pedro Monte: «Mi padre, Pedro Monte, murió de cáncer de páncreas hace ya dos años, y vivir su enfermedad y su muerte para mí fue el mayor aprendizaje de mi vida. Celebrar el aniversario de su muerte significa para mí recordar ese día de una forma diferente, con la alegría y la satisfacción de haber podido compartir con él tantos años, significa transformar la tristeza de la pérdida en una gran oportunidad para hacer algo por los demás, y darle a ese acontecimiento una utilidad que tan difícil es ver en estos casos«, asegura.
También hemos querido saber qué llevó a Mónica a apoyar la investigación oncológica a través de Vencer el Cáncer. «Mi padre estuvo enfermo durante 21 meses, a pesar de la esperanza de vida que nos dieron de 6 meses. Durante ese tiempo se trató con distintos quimioterápicos, siempre aprovechando los nuevos fármacos que salían al mercado gracias a los avances de la Investigación Oncológica. Desafortunadamente, ninguno de ellos fue definitivo, y mi padre murió antes de que se encontrara una cura realmente efectiva. Desde entonces, siempre quise contribuir de alguna manera a ayudar a que la Investigación de esta enfermedad siga adelante haciendo progresos para que otras personas como mi padre puedan beneficiarse de ello y puedan curarse y mejorar su calidad de vida. En este sentido, la Fundación VEC financia distintos proyectos de investigación de distintos tipos de tumores en diversos centros de investigación españoles, y por eso decidí colaborar con ellos».
En este II Memorial Pedro Monte, Mónica ha organizado una gran jornada solidaria, que coincide con unas Jornadas de Convivencia Ciudadana en el barrio toeldano de Santa María de Benquerencia, «donde mi padre vivió la mayor parte de su vida», apunta Mónica. Dentro de esas jornadas se incluye esta II Jornada de Larga Solidaridad «una carrera de 7 horas de duración para todas las edades en las pistas de atletismo del barrio, que vendrá acompañada de muchas otras actividades. Para la tarde del viernes contamos con: una gran fiesta de Zumba, liguilla de fútbol, salto a la comba, conciertos de rock de músicos del barrio, música de la Rondalla de San José, concursos de brochetas de fruta, diversos talleres y charlas, entre otras…y, además, daremos muchos abrazos«, desglosa.
Los fondos recaudados en esta segunda cita del Memorial Pedro Monte se repartirán este año entre la Fundación Vencer el Cáncer y un proyecto social con niños en Uganda, porque Mónica ha querido así también ayudar a otras causas importantes.
En 2015, en la I Jornada de Larga Solidaridad el objetivo era recorrer 2015 kilómetros, pero los participantes sumaron entre todos 2850. Este año el reto es aún más alto: «Me gustaría que participara mucha gente y se lograra batir el récord que nos hemos propuesto: correr 5000 km entre todos en las 7 horas que durará la carrera de Larga Solidaridad, porque la vida tiene más sentido cuando te planteas retos y si lo hacemos entre todos será mucho más divertido y más gratificante por el trabajo en equipo. Y que la gente del barrio se divierta mucho, que haya muchos donativos solidarios, y que mi padre se sienta orgulloso de lo que estamos celebrando en su memoria».
Un reto que Mónica verá cumplido gracias a la participación de todos porque, como ella misma entiende, es necesaria la participación de todos para lograr grandes cosas: «en la sociedad en la que vivimos necesitamos tomar consciencia de que nos necesitamos, que entre todos se pueden conseguir las cosas, para hacernos compañía, para que los enfermos de cáncer y sus familiares se sientan acompañados sabiendo que hay gente que se mueve por ellos, para tomar hábitos de vida más saludables, para divertirnos y ver la vida de otro color, … Es un pequeño granito de arena para hacer un mundo mejor».
Mónica y todos sus colaboradores en este y otros eventos, como Rodrigo, María y muchos más, son el ejemplo de cómo se puede ayudar a Vencer el Cáncer y a lograr un mundo mejor. Gracias.